04.11.2004 |
P.RICO-ELECCIONES Proclamación de nuevo gobernador pendiente de recuento de votos Por Iñaki Estívaliz San Juan, 4 nov (EFE).- Puerto Rico vive aún una de las más disputadas elecciones de su historia, pendiente de un recuento de votos al no conseguir ninguno de los dos principales candidatos a gobernador la ventaja necesaria para proclamarse vencedor. Para el nombramiento automático de un nuevo gobernador de la isla era necesario que el vencedor obtuviera una diferencia de 10.250 votos, algo que no logró ni Aníbal Acevedo Vila, candidato del Partido Popular Democrático (PPD), ni el favorito de todas las encuestas, Pedro Rosselló, del Partido Nuevo Progresista (PNP). Una vez escrutado el 95,18 por ciento de los votos emitidos el martes, el candidato del PPD había obtenido 936.615 sufragios, lo que representa un 48,4 por ciento, mientras que el candidato del PNP llevaba 932.159, un 48,17 por ciento. El candidato del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), Rubén Berríos, que aspiraba a obtener el 3 por ciento de votos mínimo que garantizase su permanencia en la lista de partidos inscritos, logró 51.573 los votos, un 2,67 por ciento, lo que le alejaría de la posibilidad de seguir inscrito como partido. La ausencia de una diferencia más contundente obligará a efectuar un recuento exhaustivo de votos, que comenzará el 8 de noviembre y cuya fecha límite para que lo certifique la Comisión Estatal de Elecciones del Estado Libre Asociado es el 31 de diciembre. Así que los miles de puertorriqueños que se echaron a las calles desde hace varios días para animar con ritmo de salsa a sus candidatos tendrán que esperar para celebrar la victoria. Las encuestas daban como favorito a Rosselló, del opositor PNP, quien gobernó el país desde 1993 hasta 2000, y que representa a la tendencia política conocida como «estadista», que aboga por la incorporación completa de la isla a EEUU como el estado número 51. Muy de cerca le seguía en los sondeos Aníbal Acevedo Vilá, del oficialista PPD, partido que defiende fortalecer el actual estatus político de Puerto Rico como Estado Libre Asociado (ELA) de EEUU. El independentista Berríos concurría a las elecciones para conseguir al menos ese 3 por ciento de los votos que le permitieran participar en los próximos comicios y que su partido no desaparezca. Esta es la segunda vez en un proceso electoral en Puerto Rico en que hay que efectuar un recuento de votos por la escasa ventaja por la que gana un aspirante a gobernador. La primera vez fue en 1980 cuando se enfrentaban el entonces gobernador Carlos Romero Barceló, del PNP, y Rafael Hernández Colón, por el PPD, quien finalmente ganó |
por 3.000 votos. En las elecciones celebradas el martes, los puertorriqueños votaron para elegir a su gobernador, a sus representantes y senadores, a sus alcaldes y al Comisionado Residente en Washington, que es una especie de embajador de Puerto Rico en EEUU, con voz pero sin voto. Como ganador al puesto de comisionado residente en Washington ha sido proclamado provisionalmente Luis Fortuño, del PNP. De confirmarse su victoria, Acevedo Vilá tendrá que hacer frente a un panorama difícil para administrar el país, porque el cargo de comisionado residente, la Cámara y el Senado quedaron en manos del opositor Partido Nuevo Progresista. Las elecciones coincidieron con las estadounidenses, que se celebran el primer martes de noviembre de cada cuatro años, y en las que sólo pueden votar los puertorriqueños domiciliados en EEUU. En 1952, el entonces líder del PPD, Luis Muñoz Marín, negoció con EEUU el actual estatus político de Puerto Rico, el ELA, que otorga autonomía de gobierno a Puerto Rico en muchos ámbitos, pero la limita en los temas de seguridad nacional, acuñación de moneda, relaciones exteriores y administración de correos y aduanas. En San Juan, la capital de Puerto Rico, ganó el líder del PNP y actual alcalde, Jorge Santini, con 91.866 votos frente a los 87.233 votos que consiguió el candidato del PPD, Eduardo Bhatia. |