Borges era un argentino…

lunes, 15 de febrero de 2016

2. Borges era un argentino (por Iñaki Estívaliz)
El escritor Jorge Luis Borges (Buenos Aires, 1899-Ginebra, 1986) estuvo fascinado por Islandia desde pequeño, en Islandia experimentó el mayor romance de su vida y se llevó Islandia hasta su tumba. 
El autor de “Historia universal de la infamia” (1935), “Ficciones” (1944) y “El Aleph” (1949) dedicó varios poemas al país nórdico, al que consideraba “la región” del mundo “más remota y más íntima”.
“Islandia, te he soñado largamente. Desde que aquella mañana en que mi padre le dio al niño que he sido y que no ha muerto una versión de la Völsunga saga que ahora está descifrando mi penumbra con la ayuda del diccionario”, reconoció el creador de “El informe Brodie” (1970), Premio Miguel de Cervantes de 1979 y que quedaría ciego a sus 55 años.
En una entrevista que concedió Borges al periodista Harold Alvarado Tenorio, al que el autor de “La Biblioteca de Babel” (1941) conoció en Reikiavik en 1971, el literato aseguró: “Islandia ha sido una de mis curiosidades desde mi juventud, desde cuando leí las traducciones de las sagas que hizo William Morris”.
Borges exalta ante el periodista la literatura islandesa, le dice que aprendió a narrar con las sagas, “donde ya está la novela moderna y de una manera más eficaz”, y muestra su entusiasmo por el hecho de que los islandeses “hablan como hace siete siglos, pueden leer a sus clásicos sin tener que recurrir a diccionarios o explicaciones, y desprecian a los noruegos y los suecos porque consideran que sus lenguas se han deformado”.
“El islandés tiene una belleza particular por su sonoridad y porque todavía se puede formar palabras compuestas sin que resulten artificiales o pedantes”, sostiene Borges en la entrevista a Alvarado Tenorio, con el que presume que estudia islandés “los sábados y los domingos con un grupo selecto de personas” y aplaude que Islandia sea “un gran país de clase media” donde “no hay ricos ni pobres”.
En el ensayo “Historia de la Eternidad” (1936), Borges incluye un artículo sobre las kenningar, que eran “figuras retóricas” de la literatura nórdica de los siglos IX al XII con las que se nombraban las cosas por algo que lo caracterizaba o haciendo asociaciones por contigüidad.
El escritor bonaerense estaba maravillado por “la belleza de las imágenes y profundidad de significados de algunas” de aquellas kenningar que son como “flores retóricas” que “avivan la imaginación”.
El barco vikingo se llamaba “caballo que corre por los arrecifes”; la batalla era “la tempestad de las espadas” o “la fiesta de los vikingos”; la espada se nombraba “el remo de la sangre“ o el “hielo de la pelea”; el pecho era “la casa del aliento”; y la plata “el rocío de la balanza”.
Borges encuentra en Islandia pasión y valor en una proporción que no había conocido en toda su vida. El 14 de abril de 1971 escribe a su madre, Leonor Acevedo, una postal en la que se puede leer (es fácil encontrarla en internet) que le dice que “Reikiavik es menos monumental que la Municipalidad de Lomas e infinitamente más linda, por extraño que parezca”.
En Islandia, Borges se sintió como un adolescente enamorado y se declaró a María Kodama, a la que dedicó, en “El libro de la arena” (1975), el cuento “Ulrica”, que narra la relación entre un hombre mayor y una mujer joven.
Cuenta Edwin Willianson en la biografía “Borges. Una vida” (2007), que el escritor y Kodama visitaron de nuevo Islandia en 1976 y que buscaron a un pastor pagano al que pidieron que los casara en secreto por el antiguo rito de Odín.
También es fácil encontrar en internet una foto de Borges con el barbudo pastor pagano.
En la tumba de Borges en el cementerio de Plainpalais, en Ginebra, Kodama hizo grabar una inscripción sobre un ataque vikingo.
Pero yo no podía escribir un artículo con citas robadas y datos encontrados en internet o recordados de biografías leídas hace años solo por el hecho de estar en Islandia.
Interesado en la relación de Borges con Islandia, durante semanas en suelo islandés busqué algún dato original, alguna nueva referencia, una fuente directa que me dijera algo diferente para poder escribir un artículo propio vendible.
Pero no encontré a nadie que me dijera lo más mínimo de Borges, ni una calle con su nombre o una tarja en una plaza o cualquier cosa que me justificara, hasta que un día me pareció encontrar la manera.
En las biografías de Borges se señala que en 1979 recibió la Cruz de la Orden Islandesa del Halcón en Grado de Comendador con Estrella. Busqué quién otorgaba esa distinción con la intención de que alguien me dijera algo, pues a eso nos dedicamos los periodistas. 
Investigando sobre la Orden del Halcón, que concede la Presidencia de Islandia, encontré que Borges no aparecía en las listas de personalidades que habían recibido esa cruz. Cada vez que daba con una nueva lista de condecorados con la Orden Islandesa del Halcón y Borges no aparecía entre los insignes islandeses y miembros de la realeza europea, mi corazón latía con más fuerza. Había encontrado el Santo Grial para que me pagaran un reportaje, cosa rara en estos tiempos, una exclusiva internacional: nada menos que el escritor Jorge Luis Borges, que había recibido altas distinciones en todo el mundo pero al que se le había negado el Premio Nobel de Literatura, según las malas lenguas, por haber aceptado un reconocimiento del dictador Augusto Pinochet, tampoco había sido reconocido por el pueblo de Islandia que tanto amaba a pesar de lo que decían todas sus biografías.
Yo ya fantaseaba con qué le iba a comprar a mis hijos con el dinero de mi reportaje desmontando a Borges. 
Además, Borges me debía una. Hace unos años, un catedrático de la Universidad de Mayagüez me amenazó de muerte en el legendario bar El Farolito, del viejo San Juan, porque yo le dije que Borges escribía ejercicios intelectuales sin alma, que no había sido capaz en toda su vida de escribir una sola novela y que se equivocaba al desdeñar a Lorca. El profesor, ofendidísimo, me invitó a salir a la calle. No soy nada pendenciero y me acobardé. Me aferré a la barra bebiendo cervezas y ron El Barrilito con profundo temor mientras el catedrático me miraba con ojos de odio desde la calle esperándome para el duelo a muerte.
Ahora, en Islandia, me iba a resarcir de aquel mal rato con Borges y el profesor de Mayagüez.
Escribí un correo electrónico a la Oficina del Presidente de Islandia solicitando que me confirmaran si Jorge Luis Borges había recibido la Cruz de la Orden Islandesa del Halcón en grado de Comendador con Estrella.
Recibí la contestación en menos de quince minutos.
Antes de abrir el mensaje deseé que si finalmente mi exclusiva había sido una vana ilusión y Borges sí había recibido el reconocimiento, que por lo menos me enviaran el laudo o un parrafito sobre la razón, los motivos, por los que se le había concedido, joder, algún dato para justificar mi texto.
En el mensaje de la Oficina del Presidente de Islandia me confirmaban que, efectivamente, Jorge Luis Borges había recibido la Cruz de la Orden Islandesa del Halcón en grado de Comendador con Estrella y que, precisaban, según sus registros, el condecorado era “un argentino”.

NIEVE

domingo, 14 de febrero de 2016

1. Nieve (por Iñaki Estívaliz)
En antropología nos enseñaron que los esquimales tienen unas cien palabras para la nieve. Buscando confirmar el dato para estas notas islandesas me he llevado un chasco tremendo, pues parece que no es más que una exageración de sociólogos y periodistas convertida en mito. 
Por lo visto, un tal Franz Boas, antropólogo estadounidense de origen judío alemán que rechazaba el evolucionismo, escribió en 1911 que los esquimales tienen cuatro palabras para la nieve: “aput”, o nieve en el suelo; “qana”, o nieve cayendo; “piqsirpoq”, o nieve a la deriva; y “qimuqsuq”, que es un mogollón de nieve.
El controvertido y superado lingüista de la Universidad de Yale Benjamin Whorf defendía en 1940 que según la gramática que se utilice, así se piensa, y que por eso los esquimales tendrían un innumerable número de palabras para algo de lo que están constantemente rodeados y que influye en sus vidas consistentemente.
Incautos antropólogos y periodistas de a lo grande habrían exagerado estas afirmaciones hasta el punto de que pronto el dato de que los esquimales tienen un centenar de palabras para la nieve se coló hasta en algunos libros serios.
Lo cierto es que el esquimal es una lengua aleutiana aglutinante, o polisintética, que a partir de una misma raíz puede formar varias palabras con diferentes morfemas gramaticales con sentido de oraciones. De esta manera, los esquimales forman palabras con significados de oración, como las mencionadas anteriormente, o para decir, por ejemplo, blanco como la nieve derritiéndose al sol o blanco como la nieve cuando está congelada.
El día que llegué a Islandia, donde nieve se escribe “snjór”, creía que tendría la oportunidad de preguntarle directamente a algún inuit, preferiblemente a la cantante Björk, que aquella noche, casualmente, daba una fiesta en un club de moda de Reikiavik. Pero resulta que los inut están más al norte, que Björk no es esquimal como yo creía, y tampoco me invitó a la fiesta.
Ahora que han pasado más de dos meses desde que aterricé en Islandia he visto ya mucha nieve, y me vendrían bien algunos sinónimos o un poco de polisintetismo en español para hablar de ella, de la nieve, digo.
Aquí a menudo la nieve lo cubre todo y el blanco todo lo envuelve. Pero la nieve no es monótona, aunque todo parezca un manto uniforme de nieve. La nieve puede sonar diferente cuando se camina sobre ella. El sonido de los pasos sobre la nieve varía si todavía está nevando, de si acaba de nevar o de si nevó hace tiempo; de si nevó mucho o poco rato; de si es muy gruesa o delgada la capa de nieve; de si después de nevar llovió o sopló el viento o la temperatura bajó o subió después. 
Al caminar sobre la nieve, dependiendo de esos factores, la nieve cruje, crepita, chasquea, chirría, chispea, resbala o chisporrotea. Cuando nieva durante una tormenta con fuertes vientos, la nieve suena como perdigonazos en la ropa.
Cuando el sol vence a las nubes, la nieve brilla y parece azúcar refinada. Desde el interior del cálido hogar por la ventana, la nieve parece algodón. Pero uno no se puede fiar de la nieve porque la nieve de verdad, a la intemperie, es inclemente como la cocaína.
Y no siempre es blanca la nieve. Cuando se remueve y se forman huecos por donde entra la luz, la nieve se ve turquesa. También son de color turquesa las lenguas de los glaciales entre las blancas montañas nevadas y las ventanas de cielo que se abren tímidas entre nubes grises turbulentas.
Cuando pasa el tractor quitanieves por los caminos de gravilla volcánica, en los márgenes quedan toneladas de helado de vainilla con esquirlas de chocolate. Algunos atardeceres en Islandia, las cumbres nevadas de las montañas más altas se tiñen de rosa y parecen mantecado de guayaba.

EL ESPEJISMO ISLANDÉS

Lejos del Círculo Polar Ártico, la forma en la que Islandia afrontó la devastadora crisis económica en la que cayó en 2008, encarcelando a banqueros, derrocando al gobierno y procesando al primer ministro, y al negarse supuestamente a pagar parte de su deuda o rescatar a sus bancos, se vio, sobre todo por los movimientos sociales europeos de izquierda, como un modelo a seguir, un ejemplo de democracia real y participativa, la manifestación de un paraíso popular.
De cerca, Islandia parece otro planeta con su geografía de paisajes volcánicos y boreales, salpicada de géiseres y glaciares, con sus piscinas públicas de aguas termales al aire libre bajo la nieve, sus parlamentarios sin vehículo oficial ni chófer viviendo en pequeños apartamentos donde ellos mismos se tienen que hacer la colada, y con su anterior primera ministra, Jóhanna Sigurðardóttir (2009-2013), abiertamente lesbiana.
Pero no es oro todo lo que reluce, la realidad es compleja y la historia no es la misma según quien la cuente.
La islandesa Selma Björt Stefánsdóttir tiene «casi 18 años», trabaja en un hotel limpiando habitaciones y cuando le planteo esta visión romántica de la «revolución de las cazuelas» se arranca de las orejas perforadas los auriculares del teléfono inteligente y me dice: «para contestarte déjame encenderme otro cigarrillo». Se lo prende y comienza a hablar con una sonrisa triste.
«Cuando sucedió aquello yo era muy joven y no entendía bien lo que estaba pasando. Veía a mi familia comprando un montón de cosas y gastando un montón de dinero, pero de repente no había dinero para nadie. Mi familia perdió su casa», recuerda Selma.
«Cuando yo tenía once años tuve que empezar a trabajar en un hotel. Ahora todo es muy caro. Casi no puedo pagar el alquiler de mi apartamento. Es muy duro. A veces una se pone furiosa de cómo lo jodieron todo, de cómo ahora siendo tan joven todo está frente de ti y no puedes comprar nada. Tienes que trabajar, trabajar, trabajar y nada más que trabajar y todo es carísimo, incluso la comida», lamenta la joven islandesa, casi independizada de sus padres a tan temprana edad como es normal en estas frías latitudes.
El gobierno de coalición entre el Partido Socialdemócrata y el Verde-Izquierda, que le dio la espalda a los ciudadanos que obligaron a dimitir al gobierno neoliberal y aceptó las draconianas condiciones impuestas por organismos extranjeros, «iba a hacer cosas buenas pero lo fue haciendo peor y cada vez peor. Nuestro sistema de salud era uno de los mejores del mundo y ahora está totalmente jodido. A principios de este año caí muy enferma, tuve que ir al médico y me costó mucho encontrar uno porque la mayoría de ellos se ha ido porque no hay dinero. El sistema está en la ruina, está muerto, y los impuestos son tan altos que casi todo lo que gano se me va en pagar al gobierno», se queja Selma.
Varios académicos de Reikiavik consultados para este reportaje aseguran que Islandia no es la panacea política y social que a su presidente, Ólafur Ragnar Grímsson, le gusta vender en el exterior presumiendo de que su país salió de la crisis sin recortes ni medidas de austeridad y desoyendo los consejos del Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Unión Europea, mientras anima a otras naciones de Europa azotadas por la crisis económica a seguir el modelo islandés con la siguiente fórmula: hay que poner «los intereses económicos en una mano y la democracia en la otra».
La profesora de Ciencias Sociales de la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad pública islandesa en Reikiavik, Alyson Bailes, académica británica que ha trabajado en Islandia los últimos nueve años, asegura que la presunción de que los islandeses manejaron la crisis mejor que otros países es lo que «a su presidente y otros políticos les gusta difundir, pero no es un hecho verdadero, como bien han demostrado investigaciones internas y análisis académicos».
«Creo que en muchos aspectos la crisis se manejó mal», sostiene Bailes, quien menciona un «riguroso» documento realizado sobre el colapso financiero islandés, el «Black Report (Informe Negro)», que señala numerosos errores cometidos tanto por el sector privado como por el gobierno y las «a menudo deshonestas» relaciones entre ambos.
En 2008, la economía islandesa colapsó debido a las malas prácticas financieras de sus bancos y las tres principales instituciones bancarias del país, con despachos en Gran Bretaña y Holanda, aunque no fueron rescatadas como en otros países, fueron nacionalizadas. Los islandeses se echaron a la calle a finales de aquel año haciendo sonar cazuelas para protestar por la decisión del gobierno liderado por el primer ministro Geir Haarde y temiendo que los desmanes de sus banqueros los acabasen pagando las familias.
Las protestas callejeras frente al Parlamento se intensificaron hasta que el 26 de enero de 2009 el Gobierno dimitió, principalmente, según informes académicos, porque no estaba preparado para lidiar con problemas serios de seguridad: la policía islandesa no contaba con una fuerza de choque contundente y experta; los agentes apenas si sabían cómo usar los dispositivos de gas pimienta que estrenaron aquellos días de cazeroladas y petardazos.
En abril de aquel año, llegó al poder una coalición de la Alianza Socialdemócrata y el Movimiento de Izquierda-Verdes, con el liderazgo de Sigurðardóttir, prometiendo profundas reformas, la redacción de una nueva Constitución participativa popular y la adopción del euro como moneda.
Pero la coalición de centro izquierda, a parte del espectáculo de enjuiciar a Haarde y de meter temporalmente en prisión a algunos banqueros, ni llegó a aprobar la Constitución que promulgaba una democracia participativa, de hecho la saboteó, ni llevó a Islandia a la zona euro, y finálmene pasó por el aro del FMI, al que aceptó, en contradicción directa al mandato de sus votantes, la creación de una tasa especial para que cada familia islandesa pagase unos 48.000 euros en quince años para sanear la deuda privada contraída en Gran Bretaña y Holanda por los bancos ya nacionalizados. Se le reconoce entre las pocas cosas que habría hecho bien el haber diferenciado la deuda privada y extranjera de la pública.
Aunque la prensa internacional celebró el carácter abierto y democrático de los islandeses al haber elegido como primera ministra a una mujer que vivía con su pareja del mismo sexo, expertos islandeses coinciden en señalar que la sociedad islandesa no es más igualitaria o sensible a los derechos de la comunidad LGBT que otras de su entorno nórdico.
Los islandeses volvieron a las calles en enero de 2010 negándose a aceptar las condiciones del FMI para afrontar la deuda. El presidente, con escasos poderes prácticos pero con la potestad para convocar elecciones, se negó a rubricar el acuerdo y convocó en marzo un primer referéndum que abortó el pacto entre el gobierno de izquierdas y los intereses extranjeros. Un segundo acuerdo con el FMI volvió a ser rechazado en otro referéndum en abril de ese mismo año.
Paradójicamente, el principal impulsor del rechazo a estos acuerdos entre los organismos económicos internacionales y la coalición de centro izquierda fue Sigmundur David Gunnlaugsson, líder del conservador y liberal Partido Progresista desde 2009.
En enero de 2013, una sentencia del tribunal internacional EFTA (Asociación Europea de Libre Comercio, en inglés) dio la razón a los islandeses que se negaron a pagar la deuda en las condiciones que se les imponía y que ese año le dieron la espalda a la izquierda, que supuestamente los iba a salvar pero que cedió a las presiones internacionales, y en abril saltaron a los brazos de la centro derecha tradicional del Partido Progresista de Gunnlaugsson y el Partido de la Independencia.
Estos dos partidos se habían turnado en el gobierno entre 1995 y 2007 y eran acusados por los movimientos sociales y por los ciudadanos en las protestas de haber sido los causantes de la crisis por no haber controlado los desmanes financieros de los bancos. Desde mayo de 2013, el neoliberal Gunnlaugson es el primer ministro de Islandia y lo primero que hizo al llegar al poder fue bajar los impuestos, pero sobre todo al sector pesquero, controlado por las familias más ricas del país.
Tras el anterior resumen concentrado de acontecimientos, que se vea a Islandia como un modelo ejemplar es, para el profesor de la Facultad de Administración de Empresas de la Universidad de Islandia, Örn D. Jónsson, un claro caso en el que los demás países «ven que las manzanas siempre parecen más maduras en el huerto del vecino».
Según Jónsson, el caso de Islandia ha tenido una gran repercusión mediática en el exterior a pesar del escaso peso de su población comparado con el de otras naciones (Islandia cuenta con poco más de 320.000 habitantes), no por lo bien que lo hizo, sino porque «fue la primera en caer».
Jónsson expone que en la década de 1980 Islandia se encontraba en una situación ventajosa habiendo creado un sistema bienestar saludable basado en el sector pesquero, pero que posteriormente el colapso financiero del país fue, ante todo, «resultado de las políticas económicas neoliberales y la inversión sin escrúpulos respaldada por los bancos y los fondos extranjeros. A los bancos islandeses se les permitía ir a la quiebra, por lo que algunas personas se hacían millonarias y otros tenían que pagar. Un universo económico simple y transparente se había transformado en uno mucho más complejo e inescrutable».
El profesor del Departamento de Economía de la Universidad de Islandia Ragnar Arnason asegura que «los islandeses hicieron algunas cosas razonablemente bien y otras cosas mal».
Arnason destaca que el gobierno islandés de entre 2009 y 2013, ese que salió de las protestas, «estuvo con frecuencia en desacuerdo con la población de Islandia como lo ejemplifican los dos plebiscitos».
«En pocas palabras, el gobierno estaba mucho más dispuesto a hacer lo que los gobiernos extranjeros querían que lo que quería la población general de Islandia y, curiosamente, que el presidente, que es ante todo una figura decorativa, pero con la capacidad de convocar elecciones», subraya el profesor Arnason, que señala que durante el gobierno de centroizquierda se «profundizó significativamente y prolongó sustancialmente» la depresión económica con el aumento de impuestos y con «el mantenimiento de unos controles financieros mucho más allá de la crisis inicial», que dieron como resultado una «falsificación del valor de la moneda islandesa».
También lamenta Arnason que «la disposición del gobierno a ceder a las demandas» de Gran Bretaña y Holanda, «aunque fue detenida por la población islandesa», tuvo un gran costo en atención que podría haber sido mejor dirigida a otros temas y causó que «divisiones políticas innecesarias».
Además, el juicio al primer ministro «estaba obviamente políticamente motivado y finalmente quedó en nada», y el peliculero encarcelamiento de los banqueros fue, más que un ejemplo de una manera modélica de afrontar la crisis económica, simplemente «consecuencia de que esos banqueros quebrantaron la ley».
La profesora Bailes reconoce que la alianza de centro izquierda que gobernó entre 2009 y 2013 realizó «un buen trabajo técnico con la ayuda del FMI en áreas como PIB, comercio y empleo, lo que es positivo», pero que, sin embargo, «esto se consiguió solo con estrictos controles de cambio de divisas contrarios a la práctica moderna internacional y están demostrando ser muy difíciles de superar».
«Nada se ha hecho sobre la intrínseca debilidad de la moneda islandesa, porque la única alternativa real es el euro, pero las voces anti Unión Europea siguen siendo mayoritarias aquí, y el actual gobierno de centro derecha electo en mayo de 2013 se ha negado a dejar que la gente vote libremente en un referéndum sobre la conveniencia de continuar las negociaciones de adhesión con la UE o no. El proceso de adhesión se ha congelado simplemente por acción ejecutiva de una forma que muchos ciudadanos consideran no democrática», insiste Bailes.
Para esta profesora británica en Reykiavik, la «dramática victoria» del Partido Social Demócrata y el Partido Izquierda-Verde en 2009 representó una oportunidad para atender las demandas del pueblo islandés, sin embargo, estos gobernantes «perdieron la ocasión y derrocharon su tiempo en medidas excesivamente provocativas y divisorias, mientras fallaban precísamente en esas cosas que la coalición de izquierdas debería haber hecho bien como aliviar el malestar social causado por la crisis».
«El gobierno de la coalición de izquierdas concluyó sin haber realizado decisivos progresos sobre la constitución y los votantes acabaron extremadamente desencantados», lamenta, que señala que esta es la explicación para que en las elecciones de 2013 ganaran «exactamente aquellos que gobernaron Islandia durante el período previo a la crisis y cuyas políticas de desregulación, amiguismo con las grandes empresas, y la falta de supervisión, llevó a la burbuja bancaria».
Actualmente, «durante este gobierno, los bancos han vuelto a empezar a hacer bastante lo que les da la gana, los grandes propietarios de la agricultura y la pesca y los grandes intereses vuelven a tener una excesiva influencia sobre la política, el gasto social ha sido recortado y se han introducido medidas fiscales regresivas».
Bailes indica que recientemente, ya en 2015, se han producido «interesantes nuevas tendencias», como el hecho de que un tercio de los islandeses, según encuestas, apoya actualmente al pequeño Partido Pirata, con tres escaños en el Parlamento y que surgió para luchar por las libertades en internet, «y libertades públicas en general», pero que han desarrollado «sobre la marcha» un programa más abarcador.
El ascenso de nuevos pequeños partidos como Los Piratas supone una potencial pérdida significativa de votantes para los tradicionales, advierte Bailes.
En definitiva, según la académica británica, «la vieja rivalidad derecha-izquierda» ha continuado en Islandia de una «forma destructiva» que impide «una imparcial asignación de culpas y castigos» a unos u otros.
Otro profesor de la Facultad de Economía de la Universidad de Islandia, Thorolfur Matthiasson, es menos crítico con el gobierno de izquierdas que lideró Sigurðardóttir, y asegura que Islandia hizo las cosas mal sobre todo antes de la crisis.
Después del colapso de la economía en 2008, «Islandia puso en marcha el programa más completo de alivio de la deuda para las familias y las empresas que en cualquier otro lugar» y emprendió «un proceso constitutivo ejemplar que el actual gobierno no está respaldando».
Matthiasson defiende que «el juicio contra el Primer Ministro y el encarcelamiento de los banqueros fue parte de un programa de reconstrucción de la confianza entre el público con respecto al sistema social y legal en el país». Sin embargo, reconoce, el juicio al primer ministro «se convirtió en un teatro político que no fue bueno para la reputación de nadie».
Pero no a todos los islandeses les fue mal durante la crisis. «A nosotros, de hecho, nos fue muy bien», dice el dueño de un humilde restaurante del sur islandés que prefiere que su nombre no aparezca en este reportaje. «Con la devaluación de la moneda, el turismo creció enormemente y comenzaron a venir cada vez más extranjeros», celebra el pequeño empresario.
La economía islandesa se basa actualmente en el turismo, la pesca y el aluminio, cuyos precios en alza a principios de la crisis ayudaron a que la situación no fuera todavía peor de lo que fue, explica Bailes.
En Islandia, lo único que parece barato es la energía, que los islandeses aprendieron a encauzar desde sus numerosos volcanes. Por ello, uno de los países donde resulta más económico procesar el aluminio es este. Hasta China procesa aluminio en Islandia. Ahora, la economía islandesa depende sobre todo del precio del aluminio. Pero «a hora, hay preocupaciones serias sobre los precios del aluminio», señala Bailes.
Selma apaga su cigarrillo y concluye orgullosa y decidida: «sé que es a mi generación a la que le corresponde cambiar todo aquello que se hizo tan mal y lo vamos a hacer».

Decisión Jeb Bush alarga agonía familia puertorriqueño ejecutado

EEUU-PENA DE MUERTE/P.RICO
Decisión Jeb Bush alarga agonía familia puertorriqueño ejecutado
Iñaki Estívaliz San Juan, 15 dic (EFE).- La decisión del gobernador de Florida, Jeb Bush, de suspender hoy las ejecuciones en ese estado de EEUU por fallos en el procedimiento, tras el ajusticiamiento el miércoles de un puertorriqueño, «alarga la agonía de la familia» del reo muerto.
Así lo aseguró a Efe en San Juan el presidente de la Comisión de Derechos Civiles
(CDC) en Puerto Rico, Osvaldo Burgos, quien acompañó a los familiares de Ángel Nieves Díaz la noche que fue ejecutado mediante inyección letal en la cárcel estatal de Starke, en el norte de Florida.
Bush aplazó la firma de las órdenes de ejecución hasta que una comisión analice el método que se aplica en el estado, y presente un informe final en marzo próximo.
El médico forense William Hamilton dijo hoy que la ejecución de Nieves Díaz duró 34 minutos, y requirió una segundo dosis, porque las agujas atravesaron las venas y quedaron insertadas en la carne, cuando debían estar dentro de las venas.
«Por eso tardó tanto, sufriendo, haciendo gestos (…) el cuerpo muestra quemaduras químicas porque el veneno se inyectó en el músculo», dijo Burgos, quien anunció que los restos mortales no llegarán a la isla mañana, como estaba previsto, porque tras la decisión de Bush «tienen que hacerle más pruebas».
El también portavoz de la Coalición Puertorriqueña Contra la Pena de Muerte negó que la razón de la demora en la consumación de la ejecución fuera un problema en el hígado del prisionero que le impidió «metabolizar el veneno», como indicó el Departamento de Prisiones de Florida.
Las nuevas pruebas que se le realizarán a los restos de Nieves Díaz tras una primera autopsia serán fundamentales para desvelar lo que ocurrió en su cuerpo en sus últimos momentos, pero «alargarán innecesaria e infinitamente la agonía a la familia», agregó.
«Las vivencias de los familiares fueron desgarradoras. No hay manera de describir ese sufrimiento que ahora se prolonga», insistió Burgos, y señaló que este año un informe de la organización «American Bar Association» recomendó la detención de las ejecuciones para realizar un estudio por «los muchos errores».
Explicó que, según el documento, de los 123 sentenciados a muerte desde que se restablecieron las ejecuciones en EEUU en 1976, en Florida hubo 22 casos en los que posteriormente fue demostrada su inocencia.
Jeremy Fogel, el juez federal que impuso una moratoria en las ejecuciones en California a principios de año, declaró hoy anticonstitucional el método de ejecución por inyección letal, y aseguró que su aplicación ese estado «no funciona» tal y como está ahora, pero «puede arreglarse».
Nieves Díaz fue ejecutado por el asesinato del gerente de un bar en Miami en 1979, aunque sostuvo hasta sus últimos momentos que era inocente, y sus abogados y organizaciones contra la pena de muerte alegan que se produjeron irregularidades en el juicio.
Después de perder todas las apelaciones presentadas en varios tribunales de Estados Unidos, Nieves Díaz fue ejecutado a los 55 años.
El puertorriqueño fue condenado por asesinato en primer grado del estadounidense Joseph Nagy, quien falleció de heridas de bala durante un robo en el bar que administraba.
Antes de ser arrestado por el asesinato de Nagy, Nieves Díaz se había escapado de una cárcel de Puerto Rico, donde cumplía condena por asesinato en segundo grado, y era conocido como «Papo la Muerte» por su historial delictivo, y en 1981 se había fugado de otra prisión en Connecticut.

Experto asegura que falta demostrar el efecto del cambio climático en aves

19.07.2007  
P.RICO-AVES
Experto asegura que falta demostrar el efecto del cambio climático en aves
Iñaki Estívaliz San Juan, 19 jul (EFE).- El ornitólogo Herbert Raffaele, quien participa en el décimo sexto Congreso de la Sociedad para la Conservación y Estudio de las Aves del Caribe que se celebra en San Juan, aseguró hoy a Efe que no hay evidencias de que el cambio climático haya afectado a los pájaros de la región.
Ornitólogos de una veintena de países del Caribe, además de Inglaterra y de España, comparten sus conocimientos sobre aves en el Centro de Estudios Avanzados de Puerto Rico y el Caribe.
Pero si para el presidente de la Sociedad Ornitológica Puertorriqueña, Pablo Román, como otros expertos, el cambio climático está afectando a todas las esferas de la naturaleza «como una cadena», para Raffaele, «hasta el momento no hay muchas evidencias» de que influya en las aves.
Raffaele es autor del libro «Birds of the West Indies», de obligado estudio para los ornitólogos de la región.
En la década de 1970 llegó de vacaciones a Puerto Rico y se quedó 17 años en la isla trabajando como ornitólogo.
Ahora maneja un presupuesto de 15 millones de dólares anuales como jefe de los programas internacionales de conservación del Servicio de Pesca y Vida Silvestre de los Estados Unidos.
Para Raffaele, los principales enemigos de las aves son las urbanizaciones, la cacería indiscriminada, el comercio ilegal y la introducción de especies no autóctonas.
El ornitólogo insistió en que con las aves no se tienen todavía las suficientes evidencias que demuestren que les está afectado el cambio climático como a los anfibios, de los cuales «doce especies de ranas han desaparecido» en Puerto Rico por ese fenómeno, dijo.
«El efecto del cambio climático no está muy claro en las aves», indicó el experto, que señaló que el sobre arrecifes, como sobre las ranas, sí está demostrado el ese efecto.
Raffaele indicó también que mientras otros ornitólogos reclaman a los gobiernos mayores presupuestos para investigación y para proteger mayores áreas naturales, para él, lo más importante es la educación y concienciar a la gente del valor de las especies originales de sus países.
«El problema principal es que la gente no valora los recursos que tenemos. Puerto Rico tiene una riqueza natural extraordinaria y el pueblo debe apreciarla», indicó.
Asegura que si los puertorriqueños supieran que en la isla viven 14 especies de aves originarias de la isla mientras que EE.UU. tiene «menos de diez», los boricuas aprenderían a protegerlas porque «van a tener un significado especial».
Puso como ejemplo la cotorra puertorriqueña, de la cual sólo queda una treintena de ejemplares en libertad, y que sufrió las consecuencias de la desforestación de los grandes árboles de la costa con la colonización, lo que las relegó a las montañas de El Yunque, donde las lluvias no le permiten un desarrollo óptimo.
La especie que corre más peligro de extinción en la isla después de la cotorra es el guabairo, que como sólo anida en el suelo y que casi desaparece con la introducción de mangostas jamaicanas que se realizó para acabar con las ratas en las plantaciones de caña.
En Cuba, sin embargo, la cotorra autóctona goza de mejor salud, pero «perdió su guacamayo, una chulería que se extinguió hace un siglo» por la tala de los grandes árboles con huecos que necesitaban para anidar, pero sobretodo, porque era tan hermoso que se puso de moda como mascota.
Cuba, República Dominicana y Puerto Rico conservan sus propios papagayos que evolucionaron de manera distinta por la distancia entre las islas, siendo el sanpedrito boricua el más original de todos: «ningún ave en todo el hemisferio se parece al sanpedrito».
Raffaele aseguró que la situación de las aves en todas las islas caribeñas es parecida, pero con sus características propias.
El país caribeño más perjudicado por el hombre es Haití, totalmente desforestado, pero «hay buenas noticias», porque comparte isla con República Dominicana, que ha conservado los bosques, donde consiguieron refugio las aves haitianas, finalizó. ie

Candidato negro a la gobernación enfrentará a los tres partidos tradicionales

18.07.2007  
P.RICO-CANDIDATO
Candidato negro a la gobernación enfrentará a los tres partidos tradicionales
Iñaki Estívaliz San Juan, 18 jul (EFE).- El empresario ambientalista Rogelio Figueroa formalizó hoy su candidatura a la gobernación de Puerto Rico, convirtiéndose así en el primer aspirante negro a gobernador en la historia del Estado Libre Asociado (ELA).
Desde el partido que logró inscribir este año en la Comisión Estatal de Elecciones (CEE), Puertorriqueños por Puerto Rico (PPR), enfrentará en las próximas elecciones de 2008 a los tres colectivos tradicionales del país caribeño.
Para Figueroa, el anexionista Partido Nuevo Progresista (PNP), el pro estado libre Partido Popular Democrático (PPD), y el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), han dividido de manera artificial a la sociedad boricua, donde «hay familiares que no se hablan» por su orientación política.
«El pueblo de Puerto Rico es uno y no tres», defiende este ingeniero químico de 43 años que ha trabajado en la industria farmacéutica y ha creado empresas privadas de desarrollo ecológico.
Los tres partidos tradicionales, que pusieron todas las trabas posibles para impedir la inscripción de PPR, han construido, según Figueroa, «un país inhóspito» en el que «no se puede vivir con dignidad».
Su candidatura ha demostrado, aseguró, que Puerto Rico es un país donde «se podía soñar, se puede soñar», sobretodo «cuando hay gente buena que piensa en los otros más que ellos mismos».
Aficionado a contemplar paisajes naturales junto a su novia, la administradora de la Academia Puertorriqueña de la Lengua Española, Maia Sherwood, Figueroa explicó a Efe que observar la contaminación en la naturaleza lo reafirma en su empeño como candidato.
Figueroa piensa que el color de su piel no será determinante en las elecciones porque «Puerto Rico es un país bien diverso» y la «puertorriqueña es una sociedad donde se puede ver desde el más rubio, al más negro. Así somos los puertorriqueños».
«Esta es una candidatura que representa la diversidad» porque no discrimina por color de la piel, orientación sexual o ideología sobre el estatus político del ELA, explicó Figueroa.
Que sea un candidato negro sólo le importa, dijo, a «un pequeñísimo grupo con mucho poder político».
Entre las nuevas propuestas que defiende figueroa está la de apoyar las exenciones contributivas a las empresas que crean empleo y respetan el medio ambiente y a todas las relacionadas con la reconstrucción de ciudades, el transporte colectivo, la informática y los servicios de salud y educación.
Figueroa está convencido de que «puede haber abundancia económica para todos sin perjudicar el ambiente» aumentando la producción de la agricultura y haciendo de las playas un gran parque continuo y las ciudades habitables.
«Porque yo se que ese Puerto Rico hermoso, de paz, de esperanza, de abundancia económica, es posible», sostuvo Figueroa, quien insiste en que los tres partidos tradicionales «están obsoletos».
«Tienen los pies de barro y nosotros tenemos un río», dijo en referencia a sus opositores, quienes «se están tambaleando ante un pueblo que no les cree» y ante «una alternativa que no margina, que ve a todos los puertorriqueños iguales», reiteró.
Cuando decidió entrar en la política en lugar de «tener una vida privada con abundancia económica» le dijeron: «negro, empresario, ingeniero, ambientalista… tu tienes que ser una farsa».
Pero si nadie creyó que pudiera inscribir un nuevo partido «desde cero», se empeñó en conseguirlo porque «nunca sería feliz si permito lo que está pasando hoy, con personas que están muriendo en vida pidiendo en las luces (semáforos) y no se hace nada».
Mientras se discute en el Legislativo la reforma al código civil puertorriqueño, Figueroa defiende las uniones de hecho porque los beneficios sociales «tienen que llegar a todos los puertorriqueños», aunque cree que «el matrimonio es entre un hombre y una mujer y
bendecido por Dios».
Su colaborador más cercano, Nelson Rosario, lo describió como un hombre con inteligencia creativa, buen corazón, optimista, humilde, y comprometido con las causas ambientales y comunitarias.
Rosario resaltó su «ahínco» y «su estilo amoroso de decir las cosas», su «gran disciplina, capacidad de trabajo, poderosa capacidad de concentración y poderosa memoria», pero sobretodo, «tiene la inteligencia para entender los intrincados mecanismos de la política pública».

La escritora Maritza Martínez defiende a los obesos desde el caserío

10.07.2007  16:38 utc   CULTURA
LIBROS
La escritora Maritza Martínez defiende a los obesos desde el caserío
Iñaki Estívaliz San Juan, 10 jul (EFE).- Maritza Martínez se dedicó a su familia durante veinte años, tras el divorció profundizó en el mundo de la salsa y escribió «El diario de una salsera», y ahora acaba de ponerle el punto y final a «La grandeza de ser obesa».
En este nuevo libro, para el que busca editorial confiada en su valor educativo y que será un éxito de ventas, narra sus experiencias en el caserío Manuel A. Pérez de San Juan, un complejo de viviendas para familias humildes en el que la droga causa estragos y se discrimina a «las personas grandes».
A punto de cumplir 50 años de edad, Martínez explica cómo se casó cuando tenía 14 años, cómo tuvo su primer hijo a los 15 y cómo a los 20 ya había parido a sus cuatro vástagos, a los que crió para ser «útiles a la sociedad».
Mientras estudiaba y trabajaba en diferentes empleos para echar para adelante a su familia, «las frustraciones, los desesperos, el desamor» la hicieron refugiarse en la comida
con lo que ha llegado a pesar casi 300 libras (136 kilogramos).
«Antes tenía un cuerpo de guitarra, ahora soy un contrabajo», bromea Martínez, quien además de denunciar los prejuicios contra las personas obesas, las anima a cuidarse, porque «nunca he visto un anciano obeso en un asilo, todos son delgaditos», así que si uno no se preocupa por la salud tiene «los días contados».
Aun con exceso de peso nunca ha dejado de ser «una mujer elegante», pero ha soportado el dolor que causan las miradas de desprecio, «la gente se mofa, miran por encima del hombro y creen que hasta tienes mal olor».
«Yo me quiero como soy, a lo mejor Dios me regaña (cuando llegue al cielo), pero no me va a expulsar por sobrepeso», dijo a Efe esta mujer que asegura que desde que comenzó a entrar en kilos tomó la determinación de «ser grande pero diferente».
Mientras se documentaba para «Diario de una salsera», publicado en 2003, frecuentaba locales donde acudían a diario leyendas del ritmo caribeño, quienes la conocían como «la gordita exacta» porque «siempre velaba por estar maquillada, combinada y el peinado exacto».
Toda su vida ha vivido en el residencial Manuel A. Pérez, donde viven más de mil familias a las que desde fuera del caserío se las ve como si todas tuvieran relación con la droga.
«El 80 por ciento tiene una vida útil a la sociedad, son familias sanas, que no usan drogas, pero la minoría es bien alborotosa y lo que vende en la prensa es la violencia, las drogas, los asesinatos, las violaciones», lamentó.
Asegura que hay muchos jóvenes con aspiraciones y capacidades, «pero no hay mucho que hacer, no hay talleres de arte ni canchas para deportes… y el ocio guía hacia el camino incorrecto», sostuvo la escritora, quien insiste en que «allí, durante toda mi vida he conocido a personas maravillosas».
Criticó que el gobierno no provea ayuda para «que los jóvenes hagan algo después de la escuela», y explicó que los propios vecinos han organizado programas de tutoría en los que ella misma da clases de manualidades y cocina, entre otras materias.
«Lamentablemente, un reducido grupo de personas perpetúan el mundo del caserío», dijo Martínez refiriéndose al trasiego de drogas.
Por eso, tiene el objetivo «de hacer ver que allá fuera hay otro mundo» y desde su libro hace un llamado a sus vecinos para que «busquen la llave al mundo exterior».
«Que se tracen la meta de ver más allá del alcance de la vista y que rompan con la cadena que los ata al estigma del caserío», defiende.
«La grandeza de ser obesa», explica su autora, «es una historia que describe cómo una mujer carismática, jovial y auténtica vive en el cuerpo de una mujer obesa» y desde ella les dice «a los llenitos, gorditos, gordos, gruesos, obesos o como quiera que les llamen, a que la gordura nada tiene que ver con nuestra personalidad».
«Soy gorda y cuando me miro al espejo veo a una mujer bella que dejará huella de ser una mujer clásica y elegante», defiende esta madre y escritora que siempre quiso ser «algo más» que un ama de casa sacrificada y «no una simple estadística del gobierno».

Inmigración recibe a cien nuevos ciudadanos en antiguo bastión español

12.07.2007  
P.RICO-NATURALIZACIÓN
Inmigración recibe a cien nuevos ciudadanos en antiguo bastión español
Iñaki Estívaliz San Juan, 12 jul (EFE).- Las murallas del antiguo fuerte español de San Cristóbal, en San Juan, fueron testigo hoy de la ceremonia de naturalización en la que cien nuevos ciudadanos procedentes de 18 países juraron fidelidad a la Constitución de EE.UU.
En el acto participó el director de los Servicios de Ciudadanía e Inmigración (USCIS), Emilio González, quien exclamó en español: «¡Qué lugar tan espectacular para hacerse ciudadano!».
González se dirigió luego en inglés a los nuevos estadounidenses y señaló que con este paso «comienza un nuevo capítulo en sus vidas» y recordó que Estados Unidos «es un país de inmigrantes».
«Todos somos inmigrantes de una manera o de otra», sostuvo González, que animó a los nuevos ciudadanos, que ya pueden ejercer el voto en EE.UU., a participar en los comicios «para hacer oír vuestra voz», y los alentó a contribuir a la sociedad participando en organizaciones comunitarias, profesionales o religiosas.
«Ustedes tienen una obligación de contribuir al crecimiento de la nación», insistió.
González volvió a hacer uso del español para destacar la figura de Adela Rojas Franco, cubana de 89 años que se hizo hoy ciudadana junto a dos de sus hijas, Donatella y Estrella.
Durante la ceremonia se proyectó en una pantalla gigante un mensaje del presidente George W. Bush, quien resaltó los valores del «trabajo duro, el amor a la familia y el amor al país».
«Ahora, EE.UU., no solamente es su casa, ahora es su país… y son ciudadanos de una nación donde alcanzar sus sueños», dijo Bush, quien aseguró que «es un honor ser su presidente».
Mientras la joven Vivian García López interpretaba a capella «América la bella» y «La bandera de las barras y las estrellas», afloraron las lágrimas entre algunos de los nuevos ciudadanos.
Por su parte, el juez federal José Fusté recordó que la bandera de EE.UU. nació en Filadelfia el 14 de junio de 1777 con trece barras y trece estrellas que representaban «una nueva constitución, una nueva nación dedicada a la libertad religiosa y personal».
Hoy las estrellas son 50, dijo, que simbolizan a los 50 estados de «la república más importante del mundo».
Sostuvo que la bandera de las barras y estrellas es el estandarte de «los valores de libertad, justicia y humanidad».
Los países que más nuevos ciudadanos aportaron a la ceremonia fueron República Dominicana, con 56 representantes, y Cuba, con 11.
Les siguieron España, con cinco nuevos ciudadanos; México y Colombia, con cuatro cada uno; China, Argentina y Venezuela, con tres de cada país; y Ecuador, con dos.
De Chile, El Salvador, Francia, Honduras, Panamá, Perú, Santa Lucía, San Vicente, y Vietnam, se naturalizaron una persona por país.
De Santa Lucía, la nueva ciudadana Belita December, quien vive en Puerto Rico desde hace 35 años, se dirigió a los presentes para agradecer «el privilegio» de ser «una orgullosa abuela» a la que le dan la oportunidad «de votar para decidir el futuro de mi familia».
El dominicano Roberto Giménez, de 37 años y que lleva viviendo en Puerto Rico 18 años, dijo a Efe que la ceremonia de hoy representará «un cambio muy importante en mi vida» y espera que la ciudadanía le abra «muchas puertas».
Uno de los cinco españoles naturalizados hoy, el arquitecto Manuel López, de 50 años y que lleva viviendo en Puerto Rico nueve, indicó que sintió «mucha alegría» ya que su esposa es americana, sus tres hijos han nacido en la isla caribeña y estaba «deseoso de pertenecer a este país».
Según las estadísticas de USCIS, en los Estados Unidos viven 11,3 millones de ciudadanos naturalizados y otros ocho millones de residentes pueden ser elegibles para la ciudadanía.
Durante el año 2004 el USCIS recibió a 537.000 nuevos ciudadanos, de los cuales el 54 por ciento eran mujeres.

Enrique Iglesias dice que la única droga que consume son los somníferos

10.07.2007  
P.RICO-MÚSICA
Enrique Iglesias dice que la única droga que consume son los somníferos
Iñaki Estívaliz San Juan, 10 jul (EFE).- El cantante español Enrique Iglesias aseguró hoy en Puerto Rico que «es adicto al trabajo», que disfruta de la soledad, que no bebe alcohol y que la única droga que consume son las pastillas para dormir.
En un encuentro con periodistas indicó que escribió las canciones de su nuevo disco, Insomniac, que considera el más completo de su carrera, aprovechando la falta de sueño que le ha acompañado toda la vida, y aseguró que el hecho de que lo comparen con su padre, Julio Iglesias, ya no le quita el sueño como antes.
Desde que comenzó su carrera, a los 19 años, el cantante ha vendido 40 millones de discos y la semana pasada se convirtió en el primer occidental en ofrecer un concierto en Damasco (Siria) en décadas y hoy se encuentra de promoción en San Juan.
El autor de «Experiencia religiosa» defendió que el éxito de su más reciente álbum, que es número uno actualmente en países como Polonia o India y que presentó el sábado pasado en el concierto «Life Earth» de Hamburgo (Alemania), se debe a que ha tenido «mucha suerte».
Enrique, de 32 años, indicó que está en una etapa de su vida en la que lo que le «da fuerza es el disco» en el que trabajó durante tres años limando «inseguridades», que son principalmente musicales, porque si en sus inicios le fastidiaba que lo presentasen como «el hijo de Julio Iglesias», ahora con eso no se «come el coco».
Explicó que tardó tres años porque no estaba satisfecho con el resultado y cuando creía que había acabado aparecía una nueva canción para incluir.
«Quería escribir muchas canciones y elegir las mejores, me volvía loco», declaró el artista, quien eligió los temas del disco entre 50 que compuso y en los que trabajaron 20
productores de distintos géneros musicales.
Nacido en Madrid y criado en Miami desde los ocho años, Enrique explica que trató de que las canciones no se vieran forzadas, porque «si no te lo crees la gente lo capta» y después, durante la promoción, «si no me satisface (el resultado del disco), me aburro, y dejaría el trabajo».
«Soy adicto al trabajo y me encanta mi trabajo», reiteró el intérprete.
Recordó que se independizó a los 19 años para vivir «una aventura a mi medida», lo que significó dedicarse a una carrera que requiere «24 horas al día siete días a la semana».
Durante el proceso sufrió el distanciamiento con la familia, pero «gané mucho» profesionalmente, dijo.
Antes de irse de casa, siempre estuvo «en el ojo público», pero defiende que se crió «como un chaval muy normal».
Sobre su relación de más de tres años con la ex tenista rusa Anna Kournikova, dijo que casarse «es una gran responsabilidad» y que se lo planteará «dentro de 30 o 40 años», bromeó.
Indicó que su novia lo «aguanta», aunque «es difícil aguantar mi itinerario» de promociones y conciertos y que es un hombre «complicado porque me gusta estar sólo, pero no soy difícil».
Aseguró que con su pareja «todos los días es una ocasión especial», aunque olvida los aniversarios y cumpleaños, reconoció.
«No me importa estar solo, siempre me ha gustado la soledad», insistió el artista, que se comparó con su hermano Julio José, «que tiene una novia de cinco años, rompe y a la semana tiene otra novia, necesita estar con alguien, yo no tengo miedo a la soledad».
Reconoció que de Puerto Rico le gusta el merengue de Elvis Crespo, pero sobretodo la playa «de arena blanca» de Flamenco, en la isla municipio de Culebra (este), que es «la playa más bonita del mundo».
La próxima semana rodará en Los Ángeles el vídeo del segundo sencillo del disco, «Alguien soy yo», que sacará luego del gran éxito conseguido con el primero, «Dímelo» y también está previsto que actúe en la gala de los Premios Juventud el próximo 19 de julio en Miami.

Afición por el vino en P.Rico es más sofisticada que en España, según experto

06.07.2007  19:55 utc   SOCIEDAD
P.RICO-GASTRONOMÍA
Afición por el vino en P.Rico es más sofisticada que en España, según experto
Iñaki Estívaliz San Juan, 6 jul (EFE).- Gracias a la proliferación de buenos restaurantes en Puerto Rico que incluyen en sus cartas maridajes de platos y vinos, el panorama vinícola en la isla caribeña «es más sofisticado que el español», aseguró hoy a Efe el presidente de la Academia del Vino de España, Pancho Campos.
El enólogo, uno de los dos únicos candidatos españoles al prestigioso título británico de Master of Wine, ofrece en Puerto Rico un taller para profesionales de la industria del vino en el que hace un repaso de las peculiaridades de los caldos de España.
En Puerto Rico hay «muchos buenos chefs, mucha cocina creativa y mucho buen restaurante que fusiona la cocina criolla con la modernidad y la cocina internacional y este movimiento va acompañado del vino», sostuvo Campos.
Los restaurantes tienen completas cartas de vinos y menús con maridajes donde se «acompaña un plato con el vino más adecuado con el objetivo de que los dos se complementen y ambos sean más sabrosos», indicó Campos, quien subrayó que «en España todavía no se hace».
Además, Puerto Rico está conociendo un auge en la afición por los vinos españoles paralelo al experimentado en EE.UU., donde cada vez más «la gente no quiere comer con cerveza».
Campos indicó que en los últimos cinco años las exportaciones de vino español hacia EE.UU. y Puerto Rico han aumentado un 20 por ciento, lo que se explica, principalmente, porque los vinos españoles aumentaron enormemente su calidad con la entrada en la Unión Europea, pero «el precio no ha subido».
Por otra parte, «España en general se ha puesto de moda… continuamente se habla de España en los medios por Penélope Cruz, Antonio Banderas o Fernando Alonso», pero, sobre todo, ha crecido el interés por la cocina y el restaurante El Bulli, de Ferrán Adriá, ha sido elegido el mejor restaurante del mundo dos años consecutivos.
Campos recordó, además, que «el máximo gurú» de la crítica de vinos, Robert Parker, declaró los caldos españoles como los que tienen un futuro más interesante y las tres regiones vinícolas con mejor futuro en el mundo, según el crítico, son españolas: el Priorato (Cataluña), Toro (Castilla León) y Jumilla (Murcia).
La Academia del Vino está celebrando talleres en 22 ciudades americanas y en otras 22 del resto del mundo, y como a los asistentes se les realiza un examen práctico y otro teórico sobre los vinos españoles, los 45 alumnos que obtengan mejores notas ganarán un viaje por las regiones vinícolas españolas.
Campos es también el organizador del Congreso Mundial sobre Cambio Climático y el Vino, que los próximos 15 y 16 de febrero celebrará su segunda edición en Barcelona con el ex vicepresidente de EE.UU., Al Gore, como conferenciante inaugural.
El enólogo asegura que el cambio climático está cambiando el mapa de las regiones productoras de vino en el mundo, que se están desplazando hacia el norte, siendo ejemplo de ello los excelentes caldos que está produciendo Alemania.
El cambio climático y la subida de las temperaturas han aumentado el alcohol en los caldos, que pierden acidez natural y los ciclos de crecimiento se acortan, adelantando la vendimia a la mitad del verano, por lo que la uva no alcanza la madurez generando un vino poco equilibrado y sin complejidad.
Además, han aumentado las plagas, como «la polilla del racimo», llueve menos y cuando llueve es a destiempo y violentamente: «a finales de junio en La Mancha una tormenta trajo granizos como pelotas de golf», lo que causó estragos en la cosecha, y «dos semanas más tarde ocurrió lo mismo en Alsacia (Francia)».
Por estas razones, el mayor productor de vinos españoles, Miguel Torres, está plantando vides a los pies de los Pirineos.
En otras regiones se está implantando el sistema de «canopy management», que consiste en ordenar las ramas de las vides como si fueran sombrillas para que las hojas tengan mayor exposición mientras se protegen los racimos.
Uno de los asistentes al seminario, Pedro García, es el dueño de El Mesón, en Houston (T
exas), donde, con una selección de 350 vinos, «hay que ir si se quiere beber vino español en Texas», aseguró a Efe.
García indicó que si hace diez años en EE.UU. «nadie sabia lo que era un tempranillo, ahora vienen los americanos y lo piden».