Abrumadora victoria del MAS en Bolivia y esperan regreso de Morales

Iñaki Estaliz

La Paz, 23 de octubre de 2020.- El Tribunal Supremo Electoral (TES) de Bolivia anunció hoy que había escrutado el cien por cien de los votos emitidos en las elecciones del pasado domingo y que otorgan una abrumadora victoria al Movimiento Al Socialismo (MAS).

Los líderes del MAS, Luis Arce y David Choquehuanca, serán los próximos presidente y vicepresidente, respectivamente, al haber obtenido el partido en primera vuelta un 55,10 por ciento de los votos, seguido por Comunidad Ciudadana (CC), de Carlos Mesa, con el 28,83 por ciento, y la alianza Creemos, de Luis Fernando Camacho, con el 14 por ciento.

Esos resultados han sorprendido a propios y extraños ya que la mayoría de las encuestas realizadas antes de las elecciones daban tanto al Mas como a CC una intención de voto de entorno al 40 por ciento. 

El TSE informó hoy que esta noche presentará de manera oficial los resultados finales y que proclamará a los ganadores.

Las elecciones se celebraron el pasado domingo con una participación superior al 87 por ciento y sin que se presentaran incidentes de consideración. 

Los principales líderes de la oposición han reconocido la victoria del MAS y solo algunos grupos, que han sido declarados como “marginales” por los ganadores, han protestado, aisladamente y sin mayor trascendencia, los resultados.  

Representantes de las Naciones Unidas (ONU), de la Organización de Estados Americanos (OEA) y de la Unión Interamericana de Organismos Electorales (Uniore) han avalado la legitimidad de los resultados y destacaron la transparencia e independencia del Tribunal Supremo Electoral (TSE).

El antecedente de las fallidas elecciones del año pasado, que fueron anuladas por acusaciones de fraude y tras las cuales se desató la violencia dejando 12 muertos, y el miedo al COVID-19, no impidieron que los bolivianos acudieran el domingo pasado masiva y ordenadamente a las urnas. 

El asesor electoral para Bolivia del sistema de la ONU, Luis Martínez, aseguró en radio Panamericana que no habían identificado ningún tipo de fraude ni durante la jornada electoral ni en proceso de cómputo de los votos. Martinez indicó que “en esta ocasión hubo una gran transparencia, en comparación con las anteriores” elecciones, cuando “sí que hubo muchas irregularidades” que todavía están siendo investigadas.

Por su parte, el informe preliminar de la Misión de Observación Electoral de la OEA, indica que la contienda de este año fue “más equitativa” que la del año pasado, dando como resultado “una jornada electoral exitosa en la que no se presentaron acciones fraudulentas”.

“La ciudadanía votó libremente y el resultado ha sido contundente. Esto le brinda un alto nivel de legitimidad al gobierno entrante, a las instituciones bolivianas y al proceso electoral”, añade el informe de la Misión de la OEA.

La Uniore, que ya presentó su informe el pasado lunes, constató que los comicios transcurrieron “sin contratiempos y de manera pacífica”. 

La portavoz de la Uniore, Pamela San Martín, indicó que “si bien se advirtieron algunos elementos logísticos que se pudieron mejorar y fortalecer, no se ha registrado irregularidad alguna que invalide o deslegitime el proceso electoral y sus resultados”.

Por su parte, el secretario general de la OEA, Luis Almagro, felicitó ayer al presidente electo Luis Arce y le manifestó su voluntad de trabajar con su gobierno, pero reiteró que hubo fraude en las elecciones del 20 de octubre de 2019 con “alteración de actas, actas rellenadas, actas falsificadas, servidores ocultos que transmitían votos dentro del sistema, votos de personas fallecidas que aparecían como votantes”.

El MAS y organizaciones afines como el Grupo Puebla acusaron a Almagro de haber montado un falso fraude electoral en 2019 para derrocar al entonces presidente, Evo Morales, y han solicitado su renuncia al frente de la OEA.

Por su parte, el presidente electo indicó en una entrevista con Página 12 que “evidentemente, con el resultado tan aplastante (de este año) quedó claro que el año pasado también ganamos. El compañero Evo ganó en primera vuelta, de manera limpia”. 

Morales, desde su exilio en Argentina, manifestó que Almagro “debería renunciar a la OEA” porque “sus manos están manchadas de sangre de bolivianos. No tiene moral para dirigir los destinos de la OEA”.

El MAS ha anunciado que invitará a la toma de posesión, prevista para que se realice entre el 30 de octubre y el 14 de noviembre, a todos los mandatarios de la región y a los expresidentes de Bolivia, incluyendo a Morales.

El miércoles, el presidente de Argentina, Alberto Fernández, expresó su deseo de acompañar a Morales a la toma de posesión de Arce. 

Desde Madrid, el magistrado español Baltasar Garzón, uno de los abogados de la defensa internacional de Morales, aseguró que el expresidente de Bolivia volverá a su país, «que es donde tiene que estar», según publican medios locales.

Tras las acusaciones de fraude electoral y un proceso penal que se inició en su contra en el que se le acusa incluso de terrorismo por la violencia generada tras la anulación de las elecciones, Morales se exilió a México primero y, en diciembre, a Buenos Aires, donde se encuentra en la actualidad.

Garzón plantea que nunca hubo una causa penal «real» contra Morales, como señalaría el hecho de que la Interpol «no haya dado trámite a la alerta roja de detención».

Garzón expresó que los nuevos presidentes y vicepresidentes de Bolivia deberán ejercer sus responsabilidades para que Morales pueda decidir “en libertad” si regresa a su país, “de donde nunca debió salir, y si lo hizo fue por las circunstancias claramente motivadas por un golpe de Estado cuyo objetivo era acabar políticamente con él y con su libertad”. ie