27.09.2006 CULTURA |
P.RICO-SALSA El mundo de la salsa despide con música a Tommy Olivencia Iñaki Estívaliz San Juan, 27 sep (EFE).- El mundo de la salsa despidió hoy a uno de los padres de ese ritmo como se conoce en la actualidad, Angel Tomás «Tommy» Olivencia, al son de su orquesta y con la presencia de históricos salseros y una multitud de seguidores. «Olivencia fue un pionero de la salsa. Fundó la primera orquesta que comenzó a tocar salsa de verdad», indicó a Efe el director de orquesta Willie Rosario, en la Plaza de los Salseros, donde amantes del ritmo caribeño bailaron junto al féretro del músico, que murió el viernes pasado a los 68 años de un bajón de azúcar. Tras el concierto, salseros como Sammy González, Roberto Rohena, Papo y Quique Luca y Andy Montañez, entre otros, acudieron al cementerio de Villa Palmeras en Santurce, barrio sanjuanero de donde han salido músicos legendarios como el irrepetible Ismael «Maelo» Rivera, «El sonero mayor». «A pesar de la tristeza y la pena que ha calado tan hondo entre los que aman su música y los que lo queríamos personalmente, estamos contentos porque (Olivencia) ha entrado en la historia de la salsa con letras de oro», añadió Rosario. |
El director de orquesta de salsa explicó que Olivencia le ayudó a reunir a los músicos que integrarían su conjunto cuando llegó a Puerto Rico procedente de Nueva York a principios de su carrera «aunque fuera una competencia (para él). Puerto Rico y el mundo salsero pierden una gran estrella». Por su parte, el cantante Lalo Rodríguez aseguró que Olivencia era «uno de los mayores exponentes del ritmo, de los mayores conocedores y una de las mejores escuelas donde aprendimos sus conocimientos gratuitamente». «El legado que deja papi fueron 45 años en la música. Toda la vida en la música. Su música seguirá por siempre», manifestó a Efe el viernes pasado Angel Olivencia, hijo de Tommy y manejador y timbalero de la orquesta que fundó su padre, «La Primerísima», también conocida como «La Escuelita de los Soneros». En la orquesta de Olivencia han trabajado artistas como Rodríguez, Gilberto Santa Rosa y Héctor Tricoche, y los fallecidos Marvin Santiago y Frankie Ruiz. Olivencia fue discípulo de Lorenzo Feijóo, maestro de trompeta, instrumento que tocó durante poco más de una década, después de fundar «La Primerísima» en los años 60. La carrera artística de Olivencia comenzó como cantante, pero pronto se hizo director de las orquestas de Tony Valdés, José Inés Ortiz y Tony Peñita, con quienes interpretó los temas más famosos de la Sonora Matancera. Olivencia popularizó éxitos como «Trucutú», «Fiesta de soneros», «Verdad amarga», «Planté bandera», «El Negro Chombo», «Como sube la gasolina», «Lo dudo» y «El muerto se fue de rumba». En 1967 Olivencia produjo el disco «La nueva sensación de Puerto Rico», dos años más tarde sacó el disco de su consagración, «Fire Fire», y en 1972 renovó su combo con Sammy González y Paquito Gúzman en el disco «Cuero, salsa y sentimiento». En ese momento se comienza a reclamar la presencia de «La primerísima» en los escenarios de Perú, Colombia y Panamá, pero cuando el combo trasciende las fronteras latinoamericanas es con la aparición del disco «Planté bandera», que cosechó éxitos con temas como «Casimira», «Como novela de amor» o «Evelio y la rumba». Entre 1991 y 1996, Olivencia estuvo apartado de los escenarios debido a que estuvo preso en una cárcel de Alabama tras ser declarado culpable de narcotráfico. A su salida de prisión, Olivencia fue recibido con un gran concierto en el antiguo Centro de Convenciones de San Juan, que fue abarrotado por sus seguidores y desde entonces «La primerísima» continúa ofreciendo conciertos más allá de la muerte de su director y fundador. |