23.09.2006 POLITICA |
P.RICO-GRITO LARES Asaltante a Congreso EEUU aboga por independencia mediante la paz Iñaki Estívaliz Guaynabo (Puerto Rico), 22 sep (EFE).- Los independentistas puertorriqueños conmemorarán mañana, sábado, de forma «ordenada y sin violencia», su día, el Grito de Lares, que coincide con el primer aniversario de la muerte a manos del FBI de Filiberto Ojeda Ríos, uno de sus dirigentes. Así lo aseguró hoy a Efe la octogenaria Lolita Lebrón, la única mujer entre los cuatro independentistas que el 1 de marzo de 1954 irrumpieron a tiros en el Congreso de Estados Unidos e hirieron de bala a tres legisladores. «Mañana vamos como somos, gente decente, ordenada y que no quiere la violencia», dijo Lebrón, quien defendió que «la colonia es la violencia». Puerto Rico, colonia española hasta 1898, es un Estado Libre Asociado a Estados Unidos desde 1952, lo que limita su autonomía en asuntos como defensa o acuñación de moneda. En el Grito de Lares se conmemora el levantamiento armado contra España en 1868 y el año pasado, durante la celebración, agentes de Oficina Federal de Investigaciones (FBI) atacaron la casa de Ojeda Ríos, de 72 años y uno de 10 los fugitivos más buscados por EEUU. Ojeda Ríos, quien murió desangrado horas después de ser herido, era el jefe del Ejército Popular Boricua «Los Macheteros» y durante la última semana agentes del FBI han visitado a supuestos integrantes de la cúpula «machetera» para advertirles que los vigilan para evitar que cometan actos terroristas. «Mañana nosotros vamos a cumplir con nuestro deber y a renovar nuestros votos por la liberación nacional del pueblo de Puerto Rico. Nuestra estrategia liberadora es una estrategia de paz», aseguró Lebrón, quien cumplió en prisión «25 años, seis meses y nueve días». La nacionalista puertorriqueña indicó que en Lares «se forjó la cuna de nuestra patria» y dijo que las visitas del FBI y el «asesinato» de Ojeda Ríos tienen la intención de «meterle más miedo al pueblo, pero los que somos fieles a la causa estaremos allí». «No soy una revolucionaria de ir a matar a nadie, yo creo en la paz, yo creo que podemos hacernos libres y que nos vamos a hacer libres sin necesidad de hacer una revolución armada», explicó. «No estamos arrepentidos (de los actos armados), estamos contentos, pero desde mi perspectiva, creo que no debemos ahora hacer esa estrategia sino tener otra para el momento que vivimos ahora en el siglo XXI», declaró. Defendió el derecho de soberanía de todos los pueblos y que «la colonia está ya en agonía», pues el gobierno local está «entregado a un imperio» mientras crecen la corrupción y el desorden. Explicó que antes de morir hará público un libro con las revelaciones que Dios le hizo en la cárcel en el que, entre otras cosas, le explicará al presidente de EEUU, George Bush, «lo que es terrorismo». |
«La violencia hay que borrarla de la faz de la tierra… toda, la institucionalizada y todas las demás. No es que yo no tire una piedra, yo no debo tirar la piedra, pero nadie debe tirar en absoluto nada contra nadie». Criticó que en el último informe de la Casa Blanca sobre el estatus político de Puerto Rico se afirme que EEUU puede ceder la isla a cualquier otro país «como si fuéramos cerdos», lo que supone un abuso a la dignidad: «nadie nos puede entregar a nosotros a nadie». Su fe le sirvió para sobrevivir a la pérdida de «todos mis hijos», «a un mes del asalto al Congreso murió ahogado mi hijo de once años y mi madre murió desgarrada». Lebrón concedió en exclusiva esta entrevista a cambio de que se mencionara su «agradecimiento eterno» al grupo de unas cuarenta «madrecitas» que la cuidaron durante su recuperación de un ataque al corazón y una embolia pulmonar, a Brunilda García y al Hospital El Maestro de Río Piedras. |